Identidades encontradas
Identidades encontradas
- 8 noviembre, 2017
- Posted by: Jitanjáfora
Identidades encontradas
Paula Bombara y otros
Buenos Aires
Norma
Págs.103
2017
“Y siento que yo soy yo
porque estoy entre nosotros”
Laura Devetach
Este nuevo libro, el segundo de la colección Ovillo de trazos, contiene once cuentos sobre la identidad imaginada desde diversas aristas, y dos prólogos ilustres que conjugan en sus autoras la fuerza y la potencia de dos voces representativas en la sociedad de una idea: memoria, verdad, justicia. Estela de Carlotto y Laura Devetach presentan las ficciones de autores del campo de la Literatura infantil y juvenil coordinados por la calidez y experticia de Paula Bombara. Todos y sus palabras decidieron vivir en esta apuesta en papel de ediciones Norma y ABUELAS DE PLAZA DE MAYO.
Todos juntos en un esfuerzo compartido que más suena a abrazo y canción proponen un itinerario de palabras por los temas y problemas, no todos, que dicen la identidad: abandono, adopción, olvido (en “Papá” de Luciana Rabinovich), contra la apropiación, el silencio y un tejido que no avanza porque no avanza la verdad (en “No importa” de Nilda Lacabe). La metáfora del tejido se reitera, sinónimo de escrituras literarias o no, puede o no conversar con las historias de muertes o apropiaciones, y logra, además, narrar la identidad de una aldea de pescadores, sus ritos y despedidas (en “Urdimbre” de Paula Lertora). La familia como centro, los recuerdos, las muertes y las genealogías y pertenencias atraviesan los relatos de modo indefectible: ¿quién soy? es un interrogante que anuda las gargantas y necesita decir y decirse libremente como en el relato de viaje, búsqueda y memoria (“Altamar” de Jorge Grubissich), pero también en el cuento en el que el personaje descubre la posibilidad de la apropiación en una carta de lectores en su viaje en subte, donde el silencio familiar ahoga y el suspenso se expande (en “Rompecabezas” de Márgara Averbach). O cuando los adultos no saben cómo o no pueden gestionar sutilmente la relación asimétrica con la infancia al tratarse de una muerte familiar (“El momento en que estás” de Nina Jäger).
Por otra parte, el espacio de la escuela puede ser el centro de la militancia estudiantil y los proyectos sobre la memoria en recuerdo de La noche de los lápices (en “Grillos, lápices y primaveras” de Graciela Bialet), también en su biblioteca un adulto atento puede escuchar los problemas de identidades culturales encontradas en el agravio que será posible reparar en la reconstrucción con la palabra (Mario Méndez en “Feria de las naciones”). Y en sus patios se generan las preguntas más insólitas, profundas y desestabilizantes. Allí algún personaje se pregunta por el amor por primera vez, se responde si es necesario querer como todos o si cada uno se enamora de distinta manera (Paula Bombara en “Fronteras”).
La militancia y la desaparición forzada de los trabajadores barriales se representa poéticamente a través del relato de la libertad, fundado en el símbolo de andar en bicicleta y al viento de dos amigas de la infancia (“Rumbos” de Magdi Kelisek), pero también en el largo cuento/canción que instala la década de 1980 para narrar la ausencia en la presencia de una niña viva y recuperada (en “La canción más corta y más larga del mundo” de Nicolás Schuff).
La problematización de la cuestión de la identidad, no sólo biológica, se abre y se cierra en relatos que la abordan literariamente, con procedimientos disímiles, sin moralizar ni construir un mensaje directo al respecto. Se trata sí de tejer una trama pero a través de desafíos al lector: el uso de acápites que remiten al campo cultural y abren la puerta de los textos; las voces de la música y los marcos históricos de época, la metáfora del tejido, la memoria o los viajes y los trabajos especiales sobre el tiempo del relato, generan propuestas de escrituras que harán crecer al lector desde la preadolescencia.
Se trata, como dice en el prólogo Estela de Carlotto, de que “estos textos que se suman a nuestra historia abran, entonces, nuevos interrogantes y nuevas respuestas para que podamos seguir desovillando, entre todos y todas, estos hilos de nuestra memoria colectiva”.
https://www.abuelas.org.ar/item-difusion/ovillo-de-trazos-174
Mila Cañón