Ana Membibre
Ana Membibre
- 6 febrero, 2022
- Posted by: pedro
Pasé mi infancia en el campo, en medio de la naturaleza entre el canto de los pájaros y el relincho de los caballos. No fui al jardín de infantes, el jardín era mi casa; mi mamá nos enseñaba a hacer collares de cuentas con las semillas de los árboles, nos compraba y nos leía cuentos, nos cantaba canciones. Aprendí a leer sin que me costara, fue un proceso muy natural y deseado que me abrió las puertas a un disfrute distinto: poder elegir, decidir qué quería leer y en qué momento. Además de los libros de cuentos, en casa de mis abuelos leía revistas de historietas y todos juntos resolvíamos crucigramas, siempre con el diccionario gordo a mano para despejar las dudas. Estudié Diseño Industrial y trabajo como docente en la Facultad. Pienso que la lectura es fuente de placer, de conocimiento, de conexión con mundos que pueden resultarnos ajenos hasta que los descubrimos a través de un libro. Tal vez porque la disfruto tanto, tal vez porque veo que mediante ella se abren puertas a distintas formas de saber, es que quiero compartir la experiencia de la lectura y, casi por casualidad, pero seguramente no tanto es que llegué a Jitanjáfora.