Navegar la noche
Florencia Gattari
Ilustraciones de Esteban Alfaro
Buenos Aires
Edelvives
2012
77 páginas

«Hasta que no queman las papas, nadie sabe de qué es capaz un niño que sueña» (p.74)

Esta novela corta propone una realidad maravillosa en la que todo es posible, hasta que el personaje principal tenga de apellido una onomatopeya. Conformada por personajes que se mueven y deciden a partir de sus intuiciones, de ninguna manera predecibles, la historia se pone en movimiento a partir del deseo del capitán, quien en busca de nuevas aventuras decide navegar la noche. Los otros ingredientes de esta novela son: un niño que busca ser pájaro, un río negro que no moja, una gaviota mensajera y una vecina enamorada. A través de una prosa cálida y orgánica, un cómplice narrador externo mueve los hilos de esta historia que nos deja con una sensación de picardía aventurera y con algunas preguntas como esta: ¿Quién puede jurar que el cielo no tiene olas, que el agua no es también la casa de las estrellas? (p.58)

El libro conforma la histórica colección «Ala delta» de Edelvives, dirigido a niños y niñas de entre 10 y 12 años, enriquecido por las ilustraciones de Esteban Alfaro, sin embargo, lo recomiendo para lectores de cualquier edad que tengan curiosidad por el mar, las estrellas y las buenas historias.

Angie Diz
Enero 2025