Colección Había una vez un cuadro
Colección Había una vez un cuadro
- 31 julio, 2021
- Posted by: Jitanjáfora

Colección Había una vez un cuadro
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Arte a babor
coeditada con Lecturita
La editorial Arte a babor propone “descubrir el arte desde chicos”. Sus títulos posibilitan que los pequeños lectores conozcan artistas y obras desde una mirada curiosa que invita a pensar el arte en relación con la vida cotidiana y el entorno que nos rodea. En la colección Había una vez un cuadro, una serie de obras pictóricas son el punto de partida para que los y las autoras propongan nuevos mundos, inventen historias y, principalmente, inviten a jugar con la imaginación.
Publicada en el año 2020, la colección está compuesta por cuatro títulos: El cartero barba con bolsillos de Pablo Picyk, Colorear el mundo de Ana Sanfelippo, ¿Qué ve el pintor? de Cyntia Alonso y ¡Qué lío! de Ivanke y Mey. La contratapa de ¡Qué lío!, por ejemplo, nos cuenta que “hubo una vez un pintor llamado Kazimir que encontró mucha belleza en cuadrados, triángulos y círculos”; al lado de esta frase podemos observar una imagen del cuadro Suprematismo, de Kazimir Malevich, con un epígrafe que nos informa datos técnicos sobre la obra y en qué museo podemos encontrarla. Apenas ingresamos al libro, nos encontramos con diversas y coloridas figuras geométricas que enmarcan una pregunta: “¿Qué hacemos con todo este lío?”. La respuesta, “¡Jugar!”, será la clave de lectura del libro, en el que cada página presentará figuras geométricas para jugar a diferentes cosas y componer imágenes usando la imaginación, pensando diversas opciones, explorando el espacio, inventando personajes; jugar, en definitiva, “a ser artistas”, como postula la última página. De un modo similar, en ¿Qué ve el pintor?, cada página nos muestra una situación de la vida cotidiana (“preparando un rico desayuno”, “a la hora de limpiar”) y, al lado, cómo esa imagen es transformada por la mirada del artista, la cual nos permite imaginar mundos exóticos y maravillosos sin necesidad de viajar.
La colección se presenta como “una propuesta de arte para la primera infancia” y la materialidad de los libros, de cartoné y puntas redondeadas, con tipografía en imprenta mayúscula, nos conduce a pensarlos, efectivamente, para bebés y niños pequeños. Sin embargo, como sabemos, los buenos libros conmueven a todos los lectores y quien esté interesado en el arte y desee mirar el mundo con otros ojos podrá disfrutarlos de igual manera.
Carina Curutchet
Julio 2021