Diario de un escritor
Diario de un escritor
Oche Califa
Buenos Aires
Editorial SM (Colección El Barco de vapor)
2009
Este curioso libro, publicado en 2009, muestra al lector “la cocina de la escritura”, porque pone en primer plano y a la vista (o lectura) de todos algo así como la trastienda, las bambalinas, “el detrás de escena” propios de la tarea del escritor, y deja en claro que, no es, como lo piensa uno de los personajes una labor para nada “livianita”.
Si de cocina se trata entonces el proceso de escritura, en el libro de Oche Califa aparecen los utensilios necesarios para cocinar- escribir, los ingredientes y sabores, las recetas que se leyeron para consultar la preparación, y la infaltable mano- estilo del cocinero- escritor. Las manos en la masa ya están colocadas, y la inspiración faltante emana de una niña no casualmente llamada Luz, acompañada de su perro Sombra. El escritor nos entera de todo: de sus momentos de luz, y de sombra, de desesperanza y de excitación frente al papel; de sus lecturas, de sus suposiciones, dudas y de su sorpresa maravillada antes las preguntas e intervenciones de la niña que lo arroja, inevitablemente, a escribir durante unas tarde veraniegas frente al mar.
El libro propone un paseo por él: invita a leer el diario propiamente dicho y luego nos dice qué seguir leyendo, nos hace adelantarnos varias páginas hasta encontrar el texto que creó el escritor luego de sus encuentros con la niña, para nuevamente retroceder y retomar el hilo del registro. En ese “apéndice” encontraremos todo tipo de textos, tales como villancicos, limericks, poemas, cuentos, recomendaciones, entre otros.
Diario de un escritor es un libro metaficcional, bucea en el proceso de creación literaria, reflexiona sobre la literatura, el papel del lector, la realidad y sus límites y a qué llamamos ficción.
RECOMENDACIONES
Caminar a la vera de un precipicio puede ser muy peligroso.
Colocar una mano sobre el fuego puede provocar una quemadura.
No lo haga.
Meterse en la jaula de un león es una aventura de enorme riesgo.
No lo haga.
A veces, leer un libro es como caminar a la vera de un precipicio, colocar una mano sobre el fuego o meterse en la jaula de un león. Hágalo.
Cintia B. Pellegrini