Nuevos cuentos argentinos. Literatura del siglo XXI
Nuevos cuentos argentinos. Literatura del siglo XXI
- 6 mayo, 2020
- Posted by: Jitanjáfora
Nuevos cuentos argentinos. Literatura del siglo XXI
A.A.V.V.
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
La Estación
2019
128 páginas
La editorial La Estación propone en esta antología la lectura de cuentos de autores argentinos contemporáneos, en los que se cruzan realidades distópicas con vínculos familiares hackeados por lo extraño.
En “Animalia”, Sebastián Robles presenta un mundo donde perros y gatos toman el poder del planeta, en una intertextualidad explícita con Rebelión en la granja de George Orwell. Lo que surge como una revolución en las redes sociales se convierte en un régimen totalitario que nos lleva a pensar en el estatuto de mismo del poder.
“Variables” de Tomás Downey está narrado en una tercera persona que acompaña a Silvana, quien trabaja procesando datos desde su casa. La maternidad, el puerperio y el deseo de ser tan eficiente como antes desbordan a la mujer de manera tan gradual que el lector, en principio, logra empatizar con ella. En serie con este relato puede leerse “Matrimonio” de Camila Fabbri, en donde la distancia en una pareja a partir de una discusión en principio trivial genera un ambiente enrarecido.
Por su parte, Francisco Bitar cuenta desde la perspectiva de un niño “Luces de navidad”. El mundo de los adultos se vuelve permeable para el narrador a través de la observación, principalmente del padre, en un texto conmovedor. Natalia Rozenblum también recurre a una niña para contar la percepción de los más pequeños de los cuerpos adultos en un relato llamado “Mi abuela era físicoculturista”.
En “La respuesta”, relato breve de Belén Sigot lo que sobran son, paradójicamente, preguntas y sobre todo, aquellas que se vinculan con la identidad de la protagonista. Spoiler alert: hay pocas respuestas.
Los últimos textos que mencionaremos construyen una atmósfera extraña. Samanta Schweblin remite literalmente a una situación que se repite en la trama de su cuento con el título “Pájaros en la boca”. Esta acción en loop y una rara dinámica familiar tejen un relato en los márgenes de lo ominoso. Como el cuento de Schweblin, “La canción que cantábamos todos los días” de Luciano Lamberti se mueve en el universo de lo extraño, rozando lo fantástico. Otra vez la familia tipo es protagonista a través de la voz del hermano mayor que reconstruye cómo un día al aire libre en su adolescencia marcó la existencia de todos para siempre. Por último, en “El desentierro de la angelita” de Mariana Enriquez, una antigua y oculta historia familiar se vuelve importante para la narradora. Enriquez logra incorporar con total naturalidad un fantasma a la vida cotidiana en la ciudad de Buenos Aires.
Ayelén Bayerque (abril, 2020)