Paisaje de un día
Paisaje de un día
- 2 mayo, 2021
- Posted by: Jitanjáfora

Paisaje de un día
Federico García Lorca
Ilustraciones: Isol
Buenos Aires
Calibroscopio
2020
36 páginas
Como si se leyera desde que sale el sol hasta que lo reemplaza la luna, este libro transita la vitalidad del día (y algo de los misterios de la noche). Es un libro que late, que se mueve, a veces despacito como un lagarto que llora al sol, a veces veloz como la mariposa del aire, demorado como las tardes que se tienden a lo largo de un río o loco y divertido como una tarara moviendo la cintura al ritmo de sus cascabeles.
La apuesta de Calibroscopio, sobre el proyecto del Plan de Lectura de la Ciudad de Buenos Aires, recoge algo (mucho) de la tradición en los poemas seleccionados de Federico García Lorca y los vuelve a escribir, gracias a las ilustraciones de Isol, que juegan con los textos y los repiten, como siempre hacemos con esos viejos poemas y canciones conocidos, pero en una nueva página, recreados, reforzados, focalizando un detalle, una palabra, haciendo zoom, agregando, replicando, dialogando, creando nuevos sentidos para lo ya dicho.
Era más que esperable que Isol hiciera cosas con esos textos, como ponerse a jugar con técnicas y materiales para cambiarles un poco el escenario, para recuperar la música de Federico y hacerla cantar con la propia. Impresiones, corte por doblez, reserva con cera, distintas técnicas que muestran las búsquedas creativas de Isol y que terminan con la impresión de la cara de Federico, casi escondida, como una invitación a descubrir en ese blanco sobre blanco de la luna en la contratapa del libro.
El paisaje no es aquí contemplación porque tiene movimiento, curvas y contrastes en todas las páginas, se despliega en una paleta de colores que se repiten, gracias a lo cual se logra una coherencia página a página, mientras se transitan los textos, los momentos elegidos de la obra de García Lorca y se reconocen allí esas recurrencias, esos ritmos y esos contrastes de color y de texturas.
En este libro habita y palpita esa Isol que conocemos, sus rasgos, sus caligrafías, sus tonos, sus rupturas, pero esta vez se puso a conversar con Federico, a través de los días y de los ríos y nos lo regala de vuelta, joven y lleno de gracia, susurrándonos al oído: «Mariposa, ¿estás ahí?».
María José Troglia
Mayo 2021