¿Quién soy? Relatos sobre identidad, nietos y reencuentros
¿Quién soy? Relatos sobre identidad, nietos y reencuentros
- 14 agosto, 2016
- Posted by: Jitanjáfora
- Category: Noticias
¿Quién soy? Relatos sobre identidad, nietos y reencuentros
Paula Bombara; Irene Singer. Iris Rivera; María Wernicke. María Teresa Andruetto; Istvansch. Mario Méndez; Pablo Bernasconi.
Editorial Calibroscopio
2013
El título se presenta con una pregunta o como una afirmación, gracias al trabajo puntilloso del diseño editorial que profundiza la polisemia con sus transparencias, y el universo de la palabra y la imagen se abre en cada página en busca de respuestas o de más cuestionamientos. El compromiso, la memoria, la multiplicación de miradas e ideas, la resistencia, la realidad y la ficción son columnas vertebrales de esta antología que, pensada para chicos, está profundamente anclada en la historia argentina reciente y, en particular, en el robo de identidades que tuvo lugar en la última dictadura militar.
A partir de cuatro historias reales, la de los nietos que recuperaron su identidad, se construyen cuatro relatos que, complementando texto e ilustración, ficcionalizan la historia reciente de nuestro país. Y la identidad no solo se aborda desde los protagonistas de los cuentos, sino también desde el valor estético de cada texto. Autores e ilustradores dan cuenta de su estética, su retórica y su identidad artística conformando relatos conmovedores que no menosprecian el valor literario, el cuidado de la palabra, la retórica, el color propio.
Aunque la fórmula para los cuatro relatos es la misma, cada historia tiene su riqueza particular. De este modo, el primer cuento nos acerca a una lectura que oscila entre el libro-álbum y el cómic, guiándonos al constante viaje entre imagen y texto para intentar delimitar sentidos. En la segunda historia, la escena se suaviza con trazos delicados y palabras que revalorizan los interrogantes y los vacíos. En la tercera parte, la búsqueda se hace blanco y las dudas se abren haciendo que el lector, junto a los protagonistas, se anime a sentir y a avanzar, a pesar del dolor. La realidad y los supuestos se entremezclan en un escenario de papeles cortados y juguetes de antaño. Lo onírico se hace eco de una vigilia difícil de comprender. El cuarto y último cuento posee un registro epistolar que se enriquece por los renglones que lo abrazan y se fortalece con las ilustraciones que conjugan imágenes reconocibles, huellas y metáforas visuales que profundizan la temática.
Completan esta obra los relatos de origen de los cuentos, que narran el viaje de la realidad a la ficción, fotografías documentales, y un apéndice que nos invita a saber más. Como en la construcción de la identidad, la suma de las partes logra un todo sólido y emotivo que, en este caso, cuenta con un alto valor literario.
Mariana Castro
(Julio de 2014)